La Razón
La Razón
08/10/2003
A3.3
Los campesinos esperan una señal clara del Gobierno

El diálogo está en un punto muerto porque el Ejecutivo no cede en la posición de no replegar a las fuerzas del orden de las carreteras, mientras los campesinos piden ahora incluir a la COB en las negociaciones.


En tanto las carreteras y poblados no se desmilitaricen, la dirigencia campesina no dará una respuesta a la carta que el Gobierno envió ayer al ejecutivo de la Confederación Sindical única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), Felipe Quispe, invitándolo a iniciar cuanto antes un diálogo.


El secretario de organización de la CSUTCB, Lucio Huanca, sostuvo que mientras el Ejecutivo no deje libre a los campesinos que se encuentran en la cárcel y repliegue a los efectivos del orden a sus cuarteles, no habrá diálogo. Que muestre su voluntad, si mañana (por hoy) los militares han abandonado los caminos podemos empezar el diálogo.


Los campesinos fijaron esa posición considerando que ellos han cedido en parte de sus condiciones, al aceptar que las conversaciones se hagan en El Alto y no Warisata, como demandaron en principio.


Ayer por la mañana, en conferencia de prensa conjunta, los ministros de Asuntos Campesinos, Guido áñez, y de Participación Popular, Mirtha Quevedo, informaron que enviaron otra carta al ejecutivo de la CSUTCB para reanudar el diálogo, después de que Quispe mostrara su apertura a negociar en El Alto.


áñez indicó que no será la última nota que envíen a los trabajadores del agro y que están dispuestos al diálogo, pero sin condiciones de ninguna naturaleza de parte de los indígenas.


Frente al hecho de que el Gobierno no cede, Felipe Quispe aseguró ayer que, además, desea que el diálogo incluya a los otros sectores que están aglutinados en la Central Obrera Boliviana.


Sugirió que se conformen comisiones para negociar las demandas de las organizaciones como el gas, la ley antibloqueos y el Código Tributario.


Sólo hubo intercambio de cartas


Desde que empezó el conflicto entre el Gobierno y los campesinos del altiplano, las tres cartas enviadas al líder de los trabajadores del agro, Felipe Quispe, mantienen el mismo tenor, pero no especifican un día u hora para iniciar el diálogo, hecho que según los indígenas obstaculiza un encuentro.


En las tres misivas el Ejecutivo insiste en que, en cuanto se suspendan las medidas de presión, inmediatamente las fuerzas militares retornarán a sus cuarteles y las otras peticiones serán canalizadas.


Quispe aceptó cambiar el lugar del encuentro, que inicialmente era Warisata, por el auditorio de la Radio San Gabriel, donde realiza una huelga de hambre junto a dirigentes de varias provincias paceñas. Mientras, las autoridades todavía esperan un respuesta de Quispe.