La Paz, 20 LA PATRIA

El diputado por el MIP y dirigente de los campesinos del altiplano paceño, Felipe Quispe, "el Mallku", anunció ayer que el bloqueo escalonado de caminos no será suspendido pese a las negociaciones entabladas con el gobierno.

Quispe pide la renuncia de todos los ministros del gabinete del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y reclama el cumplimiento a un compromiso de 70 puntos que incluyen la entrega de 1.000 tractores y el financiamiento para una Universidad del Altiplano.

El gobierno ya posibilitó el financiamiento de 220 tractores.

El dirigente también se opone a la probable venta del gas por un puerto chileno y al ingreso de Bolivia al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA).

La protesta de Quispe empezó el 6 de julio, cuando dirigentes de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores de Bolivia (CSUTCB) le dieron al gobierno un plazo de 15 días para cumplir con los convenios.

El miércoles 16, Quispe y un otrora acérrimo rival, el también dirigente campesino y diputado por NFR Alejo Veliz, sellaron una alianza contra el gobierno. "Los aymaras y quechuas deben estar unidos", dijo Quispe, quien anteriormente espetó que Véliz era "un calzonazo" Véliz en e.a ocasión calificó a Quispe como a un "gay (homosexual en inglés)", después de confirmarse el "duchazo" en una reunión privada en un hotel de Sucre entre el dirigente del altiplano y el entonces ministro de Asuntos Campesinos Wigberto Rivero (MIR), actual candidato a Defensor del Pueblo.

DIALOGO

El ministro de la Presidencia Guillermo Justiniano le envio a Quispe una carta el viernes para reiterarle la voluntad de "diálogo" del gobierno. El diputado se declaró insatisfecho con la propuesta gubernamental.

"Ellos tienen que anunciar punto por punto qué es lo que pueden y qué no; en esta carta no dice nada; puede ser que nos inviten a algún ministerio, pero eso no implica nada, ahí no vamos ganar nada, más bien vamos a perder", dijo.

Funcionarios del Ministerio de Asuntos Campesinos confirmaron ayer que Quispe y sus allegados se reunieron con representantes del gobierno entre las 11 p.m. del viernes en la anoche y las 2 a.m. de ayer sábado.

Pese a esos acercamientos, el parlamentario confirmó el bloqueo de caminos. "De suspender, no vamos a suspender, nosotros en ningún momento hemos suspendido para dialogar, el bloqueo va a continuar".

IMAGEN

Los detractores de Quispe aseguran que el bloqueo es una medida que no tiene apoyo y busca limpiar la imagen de un dirigente acusado de corrupción en su propio partido.

El diputado por el MIP, Germán Choquehuanca dijo que su colega busca "utilizar" el bloqueo para recuperar su imagen de líder campesino.

Choquehuanca acusó a su correligionario de estar involucrado en al menos cinco casos de corrupción y de tener "palos blancos" en el gobierno.

Quispe el 25 de junio se declaró en huelga de hambre y conminó a Choquehuanca a presentar las pruebas en su contra. Después de 48 horas, Quispe levantó la medida.

ESPERA

El gobierno anunció que esperará hasta hoy una respuesta para reanudar las negociaciones. El viceministro de coordinación gubernamental, José Carlos Campero, dijo a ABI, que el gobierno realiza una "evaluación" de los pedidos del "Mallku".

"Nosotros estamos trabajando en esta evaluación rutinaria y estamos seguros que va haber hoy, es decir, entre este sábado y la mañana del domingo una comunicación de respuesta oficial de la CSUTCB a la carta de invitación enviada por el Ministerio de la Presidencia", dijo.

Campero confirmó los "contactos informales" con Quispe e insistió en decir que el gobierno aguarda una respuesta que evite los bloqueos y-enfrentamientos.

"En todo caso, este es un proceso de negociación".

El ministro de Gobierno Yerko Kukoc advirtió que el gobierno tiene todas las prerrogativas legales para el uso de la fuerza en beneficio de "aquellas personas que tienen derecho a transitar libremente".