La Razón
La Razón
30/01/2003
P1.7
Tras la pacificación, madura la corriente de un diálogo nacional

Finalmente volvieron las negociaciones. Algunas mesas ya trabajan. El senador Carvajal sugiere un espacio amplio de discusión. En el Poder Ejecutivo existen criterios coincidentes.


Un diálogo nacional. Eso es lo que perfilan varios sectores del oficialismo en base a las mesas de discusión que comenzaron a funcionar ayer en Cochabamba, luego de dos semanas de conflicto, muertes y tensión política.


No está descartada la articulación de este diálogo con un proceso similar previsto para septiembre, donde se espera reformular la estrategia de lucha contra la pobreza.


El diálogo con diversos sectores debe ser institucionalizado y se trabaja en una propuesta, señala Hugo Carvajal, uno de los facilitadores del reciente acercamiento entre Gonzalo Sánchez de Lozada y Evo Morales.


"Los resultados de las mesas (de Cochabamba y La Paz) deben ser trasladados a una mesa de diálogo nacional con mesas que tengan a sectores nacionales para resolver las políticas (de Estado). Ese es el camino", sostuvo el senador Carvajal.


El Ejecutivo informó que mantiene diálogo con la COB, los sectores sociales agrupados con Evo Morales, colonizadores, sin tierra y sectores empresariales.


El viceministro de Planificación, Henry Oporto, considera que las conversaciones con varios sectores ya son una especie de "debate nacional", pero que se discutirá con otros sectores más, "sobre todo sobre el gas", aunque no necesariamente con la metodología de las mesas de trabajo.


Oporto no descarta que, por ejemplo, las conclusiones sobre el tema tierra sean tratadas también en el diálogo nacional 2003 que se prevé para septiembre, con una temática inicial de lucha contra la pobreza.


Al respecto, el titular de Trabajo, Jaime Navarro, quien coordina las cuatro mesas de discusión con la COB, habla de que los resultados de éste y otros espacios de análisis de temas nacionales, puedan "contribuir" al diálogo 2003.


El interés gubernamental es que otros sectores no se sientan aislados. Por ejemplo, ayer universitarios de Tarija rechazaron que su presupuesto sea tratado en las mesas de diálogo. Y ese también es el caso de los cívicos de Tarija y Santa Cruz que alientan movimientos regionales en defensa de sus intereses y frente a la presión de los cocaleros.


Ayer, en Cochabamba, el ministro de la Presidencia, Carlos Sánchez Berzaín, dijo que "el intercambio y la amplia consulta servirán como aporte a las decisiones gubernamentales.


El Gobierno dividió estas discusiones en dos áreas, las que son urgentes e importantes, las primeras tienen que ver con el presupuesto que deberá ser aprobado en el Congreso.


Son importantes el tema del gas y los hidrocarburos, el ALCA, capitalización, entre otros, que tomarán un tiempo más, pero que servirán para tomar las decisiones más adecuadas, dijo.


Morales considera que las mesas de discusión no son para que los dirigentes decidan, sino están orientadas a la consultas del pueblo, tal como establece el acta de entendimiento.


Los campesinos dicen que varias de estas mesas (con la COB) estarán "controladas", ya que el dirigente Saturnino Mallku "es de ADN" o sus resultados serán dejados de lado, dice el dirigente Lucio Huanca de la CSUTCB.


Pero Morales espera que estas mesas "signifiquen cambiar el modelo, el 21060 y acabemos con la Ley de Capitalización.