Goni confía en que podrá evitar las movilizaciones

LA Paz / ANF.? Al inicio de una semana que ha sido calificada como decisiva para frenar el anunciado bloqueo de caminos en el estratégico departamento de Cochabamba, el Gobierno ha preferido festejar por la restitución del pago del Bonosol, minimizando la posibilidad de que esas movilizaciones, lideradas por los cocaleros, se realicen.

"Creo que va a haber gente cobrando el Bonosol el próximo lunes, no creo que vaya a haber bloqueos", declaró el presidente, Gonzalo Sánchez de Lozada, mientras las posibilidades de diálogo se diluyen entre el Gobierno y los cocaleros, liderados por el presidente del MAS, Evo Morales.

Menos conciliador que en 2002, cuando se inició un proceso de negociaciones con varios sectores sociales, Sánchez de Lozada anunció que dialogará con los sectores que quieran hacerlo, en la perspectiva de hallar soluciones a sus problemas.

"La línea clara: los que quieran bloquear con el Evo, los que quieran (...) encontrar soluciones con nosotros; creo que la mayoría del pueblo vendrá con nosotros (...) Creo que nadie va ir a la fiesta del Evo", dijo el Mandatario al sumarse a la nueva definición de "las dos Bolivias" encontrada por su principal socio político, Jaime Paz Zamora.

"Dos Bolivias"

"Hoy día se ven dos Bolivias, una que paga el Bonosol, encabezada por el Presidente y la otra que prepara bloqueos. Los bolivianos tenemos que optar: o nos vamos con la Bolivia de los bloqueos o nos vamos por la Bolivia de la unidad que resuelve los problemas", declaró el líder del MIR, quien acompañó al Jefe de Estado, durante el primer día de la segunda era del Bonosol.

El concepto de las "dos Bolivias" fue acuñado por el líder sindical de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), Felipe Quispe para explicar las diferencias económicas entre el desarrollo de las ciudades y la pobreza de las comunidades rurales.

¿Tensión?

El Presidente también desvirtuó la posibilidad que el país esté viviendo un estado de tensión social, al señalar al MAS como responsable de "esa agenda política", que en su análisis, no busca hallar las soluciones que el país demanda actualmente.

El Gobierno, de acuerdo con los datos que se manejan en Palacio Quemado, inició un proceso de diálogo con 57 sectores sociales, desde agosto de 2002 y rechaza el planteamiento de Morales para discutir, en bloque, todas las demandas vigentes.

El temario de discusión que los cocaleros proponen para debatir en bloque, incluye el rechazo a la vigencia del Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA), a la venta del gas boliviano por un puerto chileno y al ingreso de tropas de EEUU, autorizadas por el Congreso.

Para las seis federaciones de cocaleros, sólo un nuevo encuentro entre Sánchez de Lozada y Evo Morales podría salvar el proceso de diálogo.

Evo acusa al Presidente

El diputado del MAS, Evo Morales, acusó al presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, de intentar dividir a los sectores sociales al señalar que deben decidir si están a favor del diálogo o con los bloqueos promovidos por el dirigente cocalero.

Morales lamentó que a pesar de las declaraciones públicas hechas por las autoridades sobre su intención de continuar con el diálogo, hasta ahora no hayan respondido oficialmente a la nota en la que se solicita una reunión con el Presidente y su gabinete ministerial.

"El afán del Gobierno es dividir, discriminar, marginar a los diferentes sectores de trabajadores de los que se niega a escuchar sus demandas", dijo. Señaló que el Gobierno está en la obligación de atender los reclamos de todos los sectores sociales y que se insistirá en que el reinicio del diálogo tome en cuenta este aspecto.

COCA Y POLITICA

El Gobierno acusa a los cocaleros del trópico de Cochabamba de politizar el problema de la coca y buscar pretextos para suspender el diálogo, debido a que este sector careció de argumentos técnicos para lograr la aprobación de una pausa en la erradicación de coca, que fue desechada por su inaplicabilidad en la zona del Chapare.