Gobierno amplía frontera petrolera (ANF, 15.11.15)
El Decreto Supremo 2549, promulgado sin mucha publicidad el 14 de octubre, representa una nueva ofensiva en la ampliación de la frontera petrolera principalmente hacia la Amazonía boliviana y forma parte de un paquete de medidas orientadas a favorecer a las empresas petroleras, con severos impactos en los derechos humanos, la democracia y la economía nacional, según alerta el Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB). La frontera se expandiría a casi 32 millones de hectáreas, incluidas las áreas protegidas.
El investigador y especialista en temas referidos a modelos extractivistas del CEDIB, Jorge Campanini, en un análisis compartido con ANF, advierte sobre los graves riesgos que a su parecer conlleva la nueva normativa aprobada por el gabinete ministerial del presidente Evo Morales.
“Desde hace una década se vienen ampliando continuamente las áreas petroleras. En tan sólo siete años, de 2005 a 2012, se incrementaron de 11 a 98 las áreas reservadas a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). Esto determinó la existencia, entre estas áreas y los contratos petroleros homologados, de una frontera petrolera que abarcó una superficie de 24.777.543 hectáreas cuadradas”, precisó.
Esta superficie inédita de frontera petrolera en la historia de Bolivia -ya que representa aproximadamente un tercio de la superficie total del país- se perfila como una amenaza de muerte hacia territorios indígenas y áreas protegidas, según Campanini.