Desalojan asentamiento ilegal en el cerro de Cota (Los Tiempos 23.12.2015)
En medio de llanto y resistencia al menos 60 familias asentadas ilegalmente fueron desalojadas por la Policía del cerro de Cota, en el límite entre Quillacollo y Vinto. En tanto que sus viviendas fueron demolidas con picotas y piedras por gente contratada. La medida fue ejecutada en cumplimiento de la Sentencia Constitucional 0363/2013 que reconoce el derecho propietario de Gualberto Mercado Olmos sobre una extensión de 19 hectáreas.
El desalojo y demolición comenzó a las 9:15 con el resguardo de 130 policías y en presencia de notario. En el operativo, tres personas fueron aprehendidas por incitar a la violencia, obstruir la justicia y avasallar predios. Las viviendas tenían pintadas en sus paredes la bandera del MAS.
Con el afán de detener la demolición, seis niños se encerraron en una de las casas. Entretanto, algunas familias negociaron en el momento la compra del terreno con el propietario.
Una de las afectadas que puso más resistencia dijo: “Siete hijos tengo. Dónde los voy a llevar. Si se trata de pagar el dinero yo estoy dispuesta a pagar”. Ella adquirió un lote de 300 metros cuadrados en 1.800 dólares. Entretanto, su hijo de cinco años, en medio de llanto, preguntó: “¿Dónde ahora he de vivir? Me lo están destruyendo mi casa”.
Entretanto, Gualberto Mercado ratificó su derecho propietario sobre 19 hectáreas. Aseguró que un grupo de más de 100 personas, procedentes del interior del país, se asentó en su predio de forma ilegal hace un año.
La supuesta propietaria de 5,5 hectáreas que estarían dentro de las 19 que la sentencia reconoció como propiedad de Gualberto Mercado dijo que el conflicto se debe a un problema de tierras entre las familias Mercado Muriel y Mercado Olmos.
Explicó que su familia cuenta con un predio de 5,5 hectáreas “en medio” del terreno en conflicto que fueron afectadas. Añadió que la sentencia mandaba el desalojo de sólo 11 viviendas; sin embargo, se derrumbaron todas.
El comandante de Quillacollo, José Moreno, informó que las familias fueron desalojadas en marzo pasado; sin embargo, los loteadores “volvieron a ingresar y a construir”. Ante ello, el resguardo policial permanecerá en la zona. Hasta ahora las alcaldías de Quillacollo y Vinto no explicaron por qué permitieron construcciones en la zona.
Conflicto entre ley y villas
A lo largo del cerro de Cota existen alrededor de 16 asentamientos irregulares aunque algunos son anteriores a la promulgación de la Ley 3194/05 que declara a la serranía “zona de protección y preservación arqueológica y cultural” por la existencia de qollqas (silos) incaicas y otros vestigios. Además, en el sector se encuentra el santuario de la Virgen de Urkupiña.
Se trata de una zona extensa que abarca el sector de Cotapachi en Quillacollo, la zona del calvario de Urkupiña y llega hasta Kuturipa en Vinto. Aunque la ley delimita ocho puntos georeferenciales que restringen los asentamientos.
En el último tiempo, la presión para urbanizar el sector se ha intensificado. Varias urbanizaciones anteriores a la normativa y otras que desean emprender proyectos urbanísticos han interpuesto un Amparo Constitucional. El mismo determinó que los propietarios perjudicados con la normativa y que no podrán construir deberán ser indemnizados por el municipio de acuerdo con lo previsto en las normas. La Gobernación y la Alcaldía de Quillacollo son las encargadas de hacer cumplir la ley que declara a la serranía Patrimonio Nacional.