Avasalladores se apropian de terrenos particulares en el país (El Diario, 06/01/13)
Los avasallamientos son tomados como un derecho, cuando es un abuso siendo las clases medias las más afectadas por el problema de la propiedad de la tierra.
Avasalladores bajo el lema de originarios se adueñan de toda tierra que puedan tomar en el territorio nacional, ocasionando intranquilidad a personas que pagaron con su trabajo por sus lotes. Además de invadir minas y otros lugares que son ricos en el país.
Salieron al paso organizaciones como el Movimiento Sin Techo o Movimiento Sin Tierra construyendo “a troche y moche”, bajo el lema que la tierra les pertenece porque son oriundos de Bolivia, olvidando respetar a la clase media que compró propiedades a fuerza de su trabajo y luego lo perdieron todo sin lograr que el Gobierno nacional haga respetar sus derechos de propietarios.
Para citar algunos casos, la ciudad de Oruro registra 31 casos de avasallamiento de terrenos, desde el 9 de marzo del 2006, a pocas semanas del ingreso de Evo Morales a la Presidencia de Bolivia, portando banderas del Movimiento al Socialismo (MAS) y aprovechándose del proceso de cambio que empezó a ejecutarse desde el 22 de enero de ese mismo año.
La mayor ocupación ilegal de terrenos de propiedad particular ocurrió en la zona Sureste de la ciudad de Oruro, donde más de mil hectáreas de tierras fueron tomadas por miembros del Movimiento sin Techo, liderados por Luis Alegría, quien se dijo haber sido formado en las guerrillas de Colombia. Desde entonces, nadie quiso actuar para frenar los abusos cometidos durante seis años.
El avasallamiento de terrenos avanzó hasta la supuesta urbanización de Santiago Orocondo. Ese terreno, de propiedad de la familia Ocampo Young, fue ocupado y distribuido totalmente, sin pagar ni un centavo al dueño, hasta el momento.
Otro avasallamiento se registró el 30 de junio del 2006, en la zona Norte de la ciudad, en los terrenos de propiedad de la familia Sierra Mier y de los trabajadores municipales. Los miembros del Movimiento sin Techo denuncian que apareció otro grupo, el Movimiento Sin Tierra, a la cabeza de Fidel Morales, que está cobrando 100 dólares por terreno copado.
Los policías y militares desalojaron a los avasalladores, pero éstos se trasladaron hacia el camino Oruro-Capachos, en la propiedad de la Familia Lafuente. Después de dos años de trámites ante las autoridades judiciales y de constantes peleas, en la zona Noreste, los dueños contrataron tractores particulares y personas para “recuperar los terrenos y destruir las casas clandestinas, porque las autoridades judiciales ni fiscales, menos policías y municipales, hacen algo por hacer respetar la propiedad privada”.
Sin embargo, los avasalladores volvieron al lugar y tomaron otra parte de los terrenos.
En la zona de Cochiraya, algunos dirigentes de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos vendieron terrenos de propiedad de la Familia Condarco, sin ningún documento. Las construcciones continúan.
La ocupación de los terrenos de Mary Cutipa Araoz, en la zona de Chapicollo, fue consumado por el Movimiento Sin Techo y Pumas Andinos 6 de Mayo, con la participación de 2.500 personas.
Los terrenos de la Urbanización de la Prensa de Oruro, comprados de la familia Urquidi, para 200 afiliados, fueron avasallados por la familia de Juana Mamani Mollo, utilizando un plano falsificado y un testimonio que no corresponde a ese lugar, apoderándose de cuatro hectáreas. El hecho ocurrió el 1 de agosto del 2009. Los periodistas, a través del Sindicato de la Prensa de Oruro, realizaron la representación ante la Policía, Ministerio Público, Alcaldía y Prefectura, sin resultado alguno hasta la fecha.
El 9 de noviembre del 2010, apareció otro grupo, dirigido por el asesor del exgeneral René Sanabria, Yanik Valenzuela Foronda, ocupando el 50 por ciento de los terrenos. Pocos meses después, Yanik Valenzuela es detenido por estar comprometido con el tráfico de droga, mimetizado en minerales. Actualmente, se encuentra recluido en la cárcel de San Pedro de La Paz. Los avasalladores no permiten ni siquiera el paso de vehículos particulares en ese lugar, donde siguen las construcciones clandestinas.
Según las permanentes denuncias que ocurren en Oruro, la ocupación ilegal de terrenos ocurre todos los días. Nadie, ni el Ministerio Público, hace respetar el derecho propietario. Los verdaderos dueños son golpeados y amenazados.
En Oruro existen 31 sitios de avasalladores. Algunos lograron “conciliar” a la fuerza con los verdaderos dueños para comprar los terrenos y registrar las minutas en Derechos Reales, pero ellos son pocos. Los terrenos de la exprefecta, Mirtha Quevedo, ubicados en la zona Este, también están avasallados.
Cochabamba
En Cochabamba los avasallamientos se presentan principalmente en zonas agrícolas y reservas forestales, como las faldas del Parque Nacional Tunari, donde los loteadores realizaron construcciones ilegales, afectando a más de 1.000 familias, principalmente en la zona este y norte de la ciudad, además del valle alto.
El departamento de Cochabamba, durante los últimos dos años, ha sido escenario de al menos diez conflictos por tierra. Se estima que tres de ellos, en zonas de alto riesgo, como el Parque Tunari, cercanías del Cerro San Pedro y la localidad de Uspa Uspa, aún están latentes y continúan propensos a ser invadidas por grupos organizados de loteadores, situación que genera conflictos y enfrentamientos.