Áreas agrícolas de Marquina corren el riesgo de desaparecer (Los Tiempos 27.12.2014)
Las localidades de Marquina, Bella Vista, El Paso, Falsuri y Pandoja de Quillacollo soportan la presión de loteadores. Los agricultores y lecheros expresaron que cada vez es más difícil mantener su actividad debido a que la expansión urbana reduce las áreas de pastoreo y elimina los canales de riego.
El último estudio sobre las pérdidas de áreas agrícolas estableció que, en los últimos seis años, las construcciones han ocupado 6.600 hectáreas de tierras productivas de la región metropolitana.
Sólo en Marquina, al norte de Quillacollo, en los últimos años se ha perdido el 30 por ciento de los terrenos agrícolas. La presión sobre la tierra se ha intensificado desde la aplicación de la Ley 247 de Regularización del Derecho Propietario Urbano, que originalmente estaba destinada a beneficiar a asentamientos con cinco años de antigüedad edificados de buena fe.
La zona más afectada en Quillacollo es Marquina Central por la proliferación de construcciones de engorde que ha alterado la dinámica agrícola por el fraccionamiento de la tierra y ha bloqueado los canales de riego. Lo último ha provocado que el agua no llegue a los cultivos. Ante las difíciles condiciones para la producción, muchos prefieren dejar de lado su actividad y vender sus terrenos.
Uno de los agricultores perjudicados, Paulino Chávez, tiene una hectárea de terreno en la zona de Marquina Central para cultivar maíz y alfalfa. Pero en los últimos dos años ha sido afectado por la construcción de viviendas, debido a que al este de su terreno se ha consolidado una urbanización con 20 viviendas que ya cuenta con empedrado sin estar dentro de la mancha urbana y sin que la Alcaldía realice un control.
La urbanización afectó a los terrenos agrícolas por el cierre de los canales de riego con ripio y hasta gangochos de tierra colocados para que las zanjas queden inutilizadas. En otros casos los conductos fueron destruidos con maquinaria pesada. Esto ocasiona que el riego no llegue a los cultivos. “Como tapan los canales, el productor se cansa de pelear con los loteadores y termina vendiendo la tierra productiva”, dijo.
Marquina es una zona esencialmente agrícola donde todavía no se ha aprobado la ampliación de la mancha urbana, sin embargo, las construcciones han proliferado. Los productores que luchan contra el avance de la mancha urbana denunciaron que existe gente infiltrada que pretende consolidar construcciones con apoyo de funcionarios de la Alcaldía de Quillacollo, informó el dirigente de los Regantes de Marquina, Edwin la Tapia.
El sector es uno de los principales productores de flores, maíz, durazno, pacay y hortalizas del valle bajo. Sus tierras son fértiles y el riego proviene de la cordillera del Tunari y de las lagunas de Marquina y Toro. La tierra es tan productiva que se ha logrado cultivar con éxito papaya, guayaba y plátano.
ESTADO METRÓPOLI
En la última década la mancha urbana en la región metropolitana ha crecido en un 156 por ciento. En 1998, la huella urbana abarcaba 7.383 hectáreas. Pero, para 2011, el límite se extendió a 18.919 hectáreas. Se estima que si la situación se mantiene hasta 2036, la configuración urbana aumentará en un 85 por ciento con 35.088 hectáreas urbanizadas en la metrópoli, según la Gestión de la Región Metropolitana de la Gobernación.
La Tapia denunció que la consolidación de viviendas es incentivada por presuntos loteadores. “El objetivo de ellos es vender luego estas viviendas con la consolidación de la mancha urbana”, alertó.
OPINIONES
EDWIN LA TAPIA, REGANTE MARQUINA
“Hay 500 regantes y agricultores”
Tenemos 500 productores agrícolas en la zona de Marquina, pero hay que tomar en cuenta que muchos de éstos han tomado la decisión de poner muros a sus terrenos para evitar el avasallamiento de los loteadores, el robo de sus productos o el daño de los mismos de parte de terceras personas. Debido a estos muros, la gente piensa que toda la zona esta urbanizada pero no es así porque dentro existen cultivos de diferentes productos. Pero los loteadores están esperando la ampliación de la mancha urbana para vender sus viviendas consolidadas.
PAULINO CHÁVEZ, AGRICULTOR DE MARQUINA
“Destruyen los canales de riego”
Para la construcción de viviendas y una urbanización privada en la zona se han destrozado y tapado varios canales de riego, lo que están buscando es cansarnos porque el agricultor debe pelear con estas personas para poder acceder al agua para riego, destapar los canales, pero al final este se termina cansando y vende sus terrenos, porque no puede acceder al agua y su tierra ya no produce como antes. Lamentablemente las autoridades no apoyan al sector productivo y al parecer sólo buscan ampliar la mancha urbana para poder cobrar más impuestos.
LUIS PÉREZ, AGRICULTOR DE MARQUINA
“Nos resistimos a ser urbanizados”
Nos resistimos a que nuestra zona sea urbanizada con la ampliación de la mancha, porque somos una tierra muy fértil donde se produce una variedad de fruta, flores y hortalizas, contamos con riego que llega de la cordillera. Lo que queremos es que se potencie la agricultura en la zona con riego por aspersión, ya hemos pedido apoyo a la Alcaldía, pero no hay respuesta. Tengo 68 años y he nacido aquí. Mi familia sólo se ha dedicado a la agricultura, en estos últimos dos años, la construcción de viviendas se ha incrementado mucho.
AFECTADOS PIDEN LA INTERVENCIÓN DE LA GOBERNACIÓN DE COCHABAMBA
Denuncian indiferencia municipal
La dirigencia de los agricultores de Marquina denunció que hasta la fecha la Alcaldía de Quillacollo no ha atendido las observaciones realizadas al proyecto de la ampliación de la mancha.
El representante de los Regantes de Marquina, Edwin la Tapia, informó que realizaron gestiones y movilizaciones desde mediados de año para evitar que la ampliación de la mancha urbana los afecte. Explicó que el gobierno municipal pretende ampliar la mancha urbana de 2.943 a 7.700 hectáreas en este sector. Si esto se consolida se afectará a las tierras agrícolas, recargas acuíferas y se pondrá en riesgo la seguridad alimentaria.
Marquina realizó varias marchas de protesta para evitar la ampliación de la mancha urbana, pero hasta la fecha no ha recibido respuesta por lo que ha solicitado la intervención de la Gobernación.
Con la consolidación de la mancha urbana los sectores más afectados serán El Paso, Pandoja, Marquina, Falsuri y Esquilán.
La Tapia señaló que detrás del proyecto de ampliación de la mancha urbana hay intereses económicos de traficantes de tierras que persiguen beneficios poniendo en riesgo la productividad agrícola y las zonas de recarga acuífera. Aseguró que la consolidación de estas viviendas y la construcción de caminos se realizan de forma improvisada y clandestina, lo cual genera más problemas a la agricultura.
Por otro lado, el secretario de Planificación de la Gobernación, Filemón Iriarte, explicó que corresponde a los municipios definir la cantidad de tierras agrícolas y la ampliación de la mancha urbana. Sin embargo, remarcó que se debe garantizar la seguridad alimentaria.
La Alcaldía de Quillacollo informó que la zona norte de este municipio no será incluida en la mancha urbana y que el plan es extender la configuración de 18.000 en 1998 a 29.000 hectáreas en 2014. Pero, los productores piden que la propuesta se realice por escrito.