CEDIB: el proyecto de hierro del Mutún es inviable (Erbol, 9.10.14)
Jueves, 9 Octubre, 2014 – 18:31
El director del Centro de Documentación e Información de Bolivia (CEDIB), Marco Gandarillas, sostuvo que el proyecto de hierro del Mutún es inviable porque presenta muchas limitaciones en infraestructura, comunicación y energía.
“Hay que resolver los problemas estructurales de vías de comunicación y medios de comunicación y el tema energético, entonces no es viable el proyecto porque tampoco hay agua en la región, el uso de agua para esta operación que estaba previsto sacarlo de una laguna tampoco hay, entonces es un proyecto que tiene muchos factores estructurales que lo hacen inviable”, apuntó el especialista en temas mineros a Erbol.
En el tema energético, Gandarillas recordó que para explotar el Mutún se necesita, en primera instancia, por lo menos 4 millones de metros cúbicos día (Mmcd) de gas “que no están disponibles”; y para la etapa industrial esta demanda aumentaría a 16 Mmcd. “Es energía que no hay, y la energía eléctrica suficiente tampoco existe”, manifestó.
El especialista sugirió que se desista del proyecto y que en su lugar se potencien otras actividades productivas entre los lugareños, fuera de la ganadería extensiva.
En julio pasado el gobierno informó que la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM) invertirá $us400 millones en la instalación de una mini acería que estará ubicada en el yacimiento de hierro del Mutún y que producirá fierro de construcción. La información se da dos años después de que la empresa india Jindal Steel Bolivia rompiera el contrato de explotación e industrialización con la ESM. Uno más de varios hechos que impiden la transformación de los recursos del yacimiento de hierro.
“La historia del Mutún es muy larga, pero los últimos esfuerzos vienen de principios de 2000, con la empresa brasilera EBX, de un magnate del hierro que terminó en 2007 con la ruptura de esa concesión y la formación de una sociedad mixta con Jindal que tampoco prosperó y se rompió en 2012”, recordó Gandarillas.
Ubicación desfavorable
El exministro de Minería, Dionisio Garzón, identificó en la ubicación geográfica del yacimiento otra desventaja. Dijo que esta situación hace que sea más cara la explotación. A esto se agrega la baja ley del mineral.
“Como este es un yacimiento que está al medio del continente, sacar producción para exportar es muy caro. En segundo lugar, el mineral del Mutún es un poco de baja ley, normalmente los minerales para que sean óptimos para una acería tienen que tener sobre 60 por ciento de hierro, y lo del Mutún está normalmente sobre 45 y 55 por ciento de hierro, entonces hay que hacer una selección, una concentración y eso obviamente eleva los costos”, manifestó.
Agregó que mientras no se solucionen los temas de infraestructura, abastecimiento de energía y comunicación, el proyecto seguirá siendo económicamente inviable por los bajos precios del mineral.
“El hierro no es un metal caro, son 100 dólares la tonelada en el mejor de los casos, puesto en la China, entonces normalmente aquí en Bolivia eso se convierte en 15 dólares la tonelada y con 15 dólares es muy difícil hacer negocios”, apuntó Garzón.
Saludó la intención del gobierno de reactivar el Mutún, pero aclaró que actualmente “todas las acerías del mundo se están cerrando porque precisamente no son un negocio”.
“En este momento hay muchas maneras de reemplazar el hierro porque se recicla, hay un montón de chatarra en el mundo y desechos de hierro que básicamente compiten con la producción primaria de hierro y de acero, entonces los proyectos de acería tienen que tener una muy buena estructura que les permita bajar los costos para ser rentables”, manifestó.
No hay política coherente
El director del CEDIB agregó que muchos proyectos mineros en el país no se concretan por la falta de una política coherente.
“El Mutún, como el del Salar de Uyuni, la explotación de oro, como el estaño, el plomo, el zinc, que son los principales minerales exportados, no forman parte de una política coherente para la extracción y transformación de los minerales, estamos ahorita sujetos a los vaivenes del mercado internacional, básicamente”, indicó el especialista.
A manera de ejemplo, señaló que con la actual fiebre del Wólfram, debido a que su precio no cayó tanto como otros minerales, hay un descontrol en la explotación.
“Se está explotando Wólfram en Santa Cruz, se está explotando en La Paz, fuera de las áreas tradicionales, y sin mucho control por parte del Estado”, indicó.