Asalariados sostienen que tributan y generan más recursos para el Estado (Opinión, 16.9.12)
La minería nacionalizada genera más ingresos para las arcas del Estado producto de regalías y tres impuestos, respecto a los cooperativistas, según datos proporcionados por la Central Obrera Boliviana (COB) y el Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB).
El secretario ejecutivo de la máxima entidad laboral, Juan Carlos Trujillo, justificó el pedido de nacionalización de Colquiri porque las mineras estatales tributan más que los cooperativistas con menos espacios de operación.
Según información proporcionada por el ejecutivo de los trabajadores, la minería sindicalizada aportó en 2011 a las arcas del Estado 462 millones de dólares, en cambio el sector cooperativista aportó 43 millones de dólares.
En el primer semestre de este año la minería nacionalizada aportó 141 millones de dólares, en cambio las cooperativas 16 millones de dólares.
Trujillo considera que no se trata de medir fuerzas entre cooperativistas y sindicalizados, sino el aporte que se hace en beneficio del Estado que va a todos los bolivianos.
Solo la estatal Colquiri de enero a junio de 2012 desembolsó un total 4,6 millones de dólares al fisco. En tanto que la Cooperativa 26 de Febrero en el mismo periodo 240 mil dólares.
De acuerdo a su cálculo, con la explotación de la veta El Rosario, sector en conflicto, se multiplicaría los ingresos por impuestos a 8 millones de dólares en seis meses.
“Por eso planteamos con una visión de país la reversión de todo Colquiri, en sí la eliminación del sistema cooperativo a nivel nacional, porque no podemos poner en riesgo la economía del país”, aseveró.
El CEDIB informó que de los tres impuestos que deben pagar todas las empresas del sector minero, los cooperativistas solo pagan uno.
Los tres impuestos son: la regalía minera, Impuesto a las Utilidades de las Empresas (IUE) y la alícuota adicional al Impuesto a las Utilidades de las Empresas.
Para el caso de las regalías el porcentaje que se paga es variable según el mineral y los precios; el pago es entre el 1 y 7 por ciento del valor de producción. Todos los sectores lo pagan, el estatal, el privado y el cooperativista.
Sin embargo, no ocurre lo mismo con el impuesto a las utilidades, que representa el 25 por ciento y la alícuota que es del 12,5 por ciento sobre utilidades cuando los minerales tienen buenos precios. De estos gravámenes están exentas las cooperativas por su “carácter social” como lo estipula la Constitución Política del Estado.
Empero, las cooperativas sí pagan el canon de arrendamiento, aunque no como impuesto, lo hacen por las concesiones mineras de la Comibol y representa el 1 por ciento sobre el valor de producción.
Los asalariados ahora exigen al Gobierno la recuperación de la veta El Rosario, que se encuentra en manos de mineros cooperativistas a quienes acusan de explotar los minerales sin pagar impuestos y en alianza con empresas privadas.