La marcha da un día de espera al Gobierno
TIPNIS. Saldrá mañana de Caranavi hacia San Pedro
Pablo Ortiz. Caranavi
El silencio impera, pero hay la esperanza de que hoy el Gobierno de Evo Morales acceda a dialogar con la columna de la novena marcha indígena, por ello esperarán en Caranavi a que el Ejecutivo se pronuncie.
Según Adolfo Chávez, presidente de la Confederación Nacional de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob), de esta manera se cumplirá con los tres días de espera que se le dio al Gobierno antes de continuar la movilización, ya que difícilmente encontrarán otro lugar con las condiciones logísticas para dialogar como Caranavi.
Hoy por la mañana, la avanzada saldrá a explorar para encontrar un nuevo lugar donde acampar. Se prevé que sea en San Pedro, a 33 kilómetros de Caranavi. Con cada nuevo tramo, se dejará atrás el calorcito de Yungas para acercarse al frío del altiplano.
Eso provocará que Caranavi sea la última pascana larga de la marcha, ya que Chuspipata y Pongo, pueblos donde descansó la octava marcha en 2011, serán demasiado fríos como para quedarse más de una noche. En Pongo y en Urujara, la entrada a La Paz, ayer había nieve y ni los campings ni los abrigos de los marchistas están preparados para esas condiciones. Otro factor a tomar en cuenta es que la mayoría de los indígenas vienen del Tipnis y de otros sectores benianos, por lo que no están acostumbrados a temperaturas extremas. Es por eso que incluso el fresco del amanecer y la neblina en la que se sumerge el campamento en Caranavi afectan seriamente a su salud.
Mayra Palacios, la médica que acompaña la marcha, explica que por ahora la mayoría de las afecciones son respiratorias, en la laringe y la faringe, y están siendo controladas, pero se harán más severas a medida de que la marcha suba a La Paz.
Con la falta de pascanas o lugares calientes donde quedarse, se prevé que la movilización llegue a La Paz en unas dos semanas. Pero para ello se quiere dar una imagen de fortaleza. Bertha Bejarano, presidenta de la marcha, considera que en La Paz ayer había un centenar de indígenas de tierras bajas en tránsito para llegar a la marcha. Se trata de representantes de los chiquitanos, moré, itonamas, tacana y sirionós que se sumarán a la movilización. Luego se espera el arribo de miembros del Gran Cabildo de Trinidad y se carece de recursos para que lleguen más personas desde los territorios Movima y Multiétnico 1, ambos cercanos a San Borja. Así lo explicó Nazaret Flores, presidenta de la Central de Pueblos Indígenas de Beni. Mientras espera la salida, la columna disfruta de la hospitalidad de los caranaveños.
A cada rato aparece en el campamento alguna voluntaria con pastillas para los niños, alguna olla con comida o vitaminas para la farmacia. Ayer tuvieron tanta suerte que incluso hubo una torta para que disfruten algo parecido a un postre. Todo eso lo comenzarán a extrañar desde mañana.
De a pie
– Expectativa. La columna siguió ayer las eliminatorias sudamericanas para el Campeonato Mundial de Brasil 2014. Lo hicieron a través de un televisor mediano que pusieron en el campamento.
-Privilegio. Los músicos del campamento tienen una tarea sacrificada cuando la marcha sale a la carretera. Además de marchar, como todos, deben ir amenizando la caminata con taquirari y chobena. Pero cuando llegan a los campamentos, por lo general son los adulados y por una tocada les cae siempre algún pedazo de torta o pastillas.
-Cuidados. Hoy habrá revisión médica para las mujeres embarazadas de la marcha. La doctora Palacios las llevará al hospital para hacer ecografías y otros exámenes prenatales. La que más preocupa es una mujer del Sécure, que tiene más de ocho meses de embarazo. La columna creyó que ella había dado a luz al llegar a Caranavi, pero se trataba de una caranaveña que había ido a recibir a los marchistas.